La salud y el aire acondicionado han sido, históricamente, dos términos polémicos. Al menos, controvertidos, ya que hay muchas teorías sobre los perjuicios que el aire acondicionado tiene para nuestra salud. En este artículo no vamos a hablar de los beneficios del aire acondicionado, porque son obvios y por ello es un aparato cada vez con mayor presencia en los hogares españoles.
Sin embargo, sigue habiendo muchas teorías que comentan los problemas para la salud provocados por el aire acondicionado. Vamos a ver la relación entre la salud y el aire acondicionado.
1.- Uno de los principales problemas que se han detectado en la salud por el uso del aire acondicionado son los respiratorios. La garganta sufre irritaciones en muchas ocasiones y también se ve afectada la mucosa branquial. Unido a otras afecciones como las nasales, con especial incidencia de rinitis, sin duda hay que tener cuidado con el aire acondicionado. Hay estudios que apoyan estas teorías exponiendo que las personas en espacios con aire acondicionado padecen rinitis en un 28% de los casos, mientras que este porcentaje se reduce 5% en las personas que no disponen de aire acondicionado.
2.- Muchos usuarios de aire acondicionado muestran también dolor de cabeza. Esta situación suele estar provocada por el descenso en la calidad del aire por un mal mantenimiento del aire acondicionado.
3.- Otro problema para la salud por el aire acondicionado es la hidratación. Al disponer de un ambiente más fresco y húmero, tendemos a hidratarnos menos, con el perjuicio que esto nos puede ocasionar.
4.- Hay personas que se quejan de sequedad en los ojos debido al aire acondicionado.
5.- Otro aspecto negativo del aire acondicionado es el empeoramiento en personas que padecen alergias o asma.
6.- Igualmente, está demostrado que hay personas que padecen piel seca y picores por el uso del aire acondicionado combinado con la incidencia del sol.
Estas son algunos de los problemas de salud por el aire acondicionado. Sin embargo, tampoco hay que alarmarse, puede las padece un porcentaje de la población. Además, muchas de ellas se pueden mitigar, e incluso eliminar, siguiendo unas recomendaciones básicas. Las más importantes serían utilizar de forma correcta la temperatura del aire acondicionado manteniéndolo entorno a los 24 grados, realizar un correcto mantenimiento de los aparatos, evitar el flujo de aire directo en las personas y mantener una humedad en la casa de entre el 30 y el 60%.
Con estos pequeños consejos, será mucho más fácil la convivencia con el aire acondicionado.