Parece mentira. Hace muy poco estábamos hablando de la primavera y el verano y ya estamos ofreciéndoos consejos sobre cómo preparar la casa para el invierno. El tiempo pasa muy rápido, por lo que también tenemos que darnos cierta prisa si queremos que la llegada del otoño y el invierno nos pillen con “los deberes hechos” en cuanto a que nuestra casa esté preparada para el cambio de estación… y de temperaturas.
Lo primero que tenemos que tener claro es que una casa bien aislada tiene todos los deberes hechos. Por eso, este puede ser un buen momento para decidir acometer esa pequeña reforma que te dejará la casa confortable los 365 días del año. Cada casa es un mundo, así que si lo crees oportuno, cuéntanos tu caso y te ayudaremos sin ningún tipo de compromiso. Y no, no creas que tu caso es aislado. Según Danosa, el 99% de las viviendas españolas están mal aisladas y sufren pérdidas de calor innecesarias.
Si aún no ha llegado el momento de enfrentarse al problema de base, el mal aislamiento, te vamos a dar algunos pequeños, pero efectivos, consejos para que pases un otoño-invierno lo más confortable posible al menor coste posible. Vamos a ello.
Lo primero y lógico es revisar la caldera. Antes de proceder a su encendido, es importante hacerle una revisión a fondo para garantizar que todo el sistema funciona correctamente y responderá a la perfección cuando nos haga falta.
Igualmente, hay que asegurarse que los transmisores del calor, es decir, los radiadores, también están en buen estado. Si es necesario, púrgalos para quitarles el aire (aquí te decimos cómo hacerlo). Y no te olvides de no taparlos nunca con ropa ni similares.
Y hablando de calderas y radiadores, ten mucho cuidado con el termostato. La temperatura de confort en invierno es entre 20 y 22 grados. Cada grado de más en el termostato es un 7% más de consumo. Calcula…
Según el IDAE, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, el 30% de las pérdidas de calor de las viviendas tienen su origen en las ventanas. Así que ya sabes, en los consejos sobre cómo preparar la casa para el invierno no podíamos dejar de lado tan importante elemento. Si puedes, cámbialas por unas modernas que aislan a la perfección. Si no puedes/quieres, revísalas para asegurarte que cierran herméticamente y no hay pérdidas de calor. Otro aspecto importante es que las observes con detenimiento, sobre todo su contorno, y selles grietas o juntas en mal estado.
Algo parecido ocurre con las persianas y, sobre todo, con las cajoneras. Respecto a las persianas, revísalas para ver que cierran bien y no tienen ninguna lama rota. En las noches de mucho frío, bajarlas supone una nueva capa de aislamiento de tu casa con el frío. Respecto a las cajoneras, sobre todo las antiguas, son un elemento habitual de pérdida de calor… y en cantidades considerables. Aislarlas bien es, sencillamente, fundamental.
Y, como es habitual en nuestros consejos, aprovecha todo lo que puedas la luz solar. Te ayudará a mantener una temperatura más agradable.
Y no podemos concluir estos consejos sobre cómo preparar la casa para el invierno sin hablar de “la ropa”. Y no sólo de la tuya, ya sabes que no debes ir en pantalón y camiseta corta en invierno, sino de la propia casa. Saca el nórdico, airéalo y lávalo. Vuelve a poner las alfombras y cambia las cortinas por unas más gruesas, sí, las de invierno que quitaste en abril.
Recuerda que lo principal es invertir un poco en el aislamiento general de la casa porque es una inversión que se recupera pronto con el ahorro en energía, pero en caso contrario, sigue estos pequeños consejos que agradecerá tu confort… y tu bolsillo.