Aislamiento acústico y confort

Aislamiento acústico y confort son sinónimos. En una vivienda es fundamental para crear un ambiente tranquilo y confortable, especialmente en las ciudades donde el ruido del tráfico, las obras y otros factores externos pueden ser una fuente constante de molestia. ¿Te imaginas llegar a tu casa y padecer ruidos externos constantes? Probablemente no tengas que imaginarlo porque lo sufras a diario. Por eso es básico el aislamiento acústico de tu vivienda.

Pero para un aislamiento acústico y confort eficaz, lo primero es identificar las fuentes de ruido. Estas pueden ser externas, como el tráfico y las obras que hemos mencionado, o internas, como el ruido de electrodomésticos o sistemas de calefacción. Por eso, para poder poner las soluciones, primero tenemos que saber de dónde proceden esos molestos ruidos que nos hacen la vida imposible. Aislar acústicamente la vivienda por profesionales es la forma más segura de atajar de forma drástica las fuentes de ruido.

aislamiento acústico y confortLas ventanas son una de las principales vías por donde el ruido exterior llega a nuestro hogar. Para mejorar su aislamiento, se pueden tomar medidas como la instalación de ventanas de doble o triple acristalamiento, que tienen múltiples capas de vidrio con espacios de aire o gas entre ellas, lo que reduce significativamente la transmisión del sonido; o un sellado adecuado, utilizando burletes y selladores de silicona para cerrar cualquier grieta o hueco. Las puertas también pueden ser mejoradas para reducir el ruido. Reemplazar las puertas huecas por puertas macizas, que tienen una mejor capacidad de bloqueo del sonido, y utilizar burletes y sellos en los marcos de las puertas para evitar que el ruido se filtre a través de las ranuras son opciones efectivas.

Para mejorar el aislamiento acústico y confort entre habitaciones de nuestra casa, se pueden colocar paneles de yeso o paneles acústicos especiales en las paredes, ya que estos materiales están diseñados para absorber el sonido. Otra opción es rellenar las cavidades de las paredes con materiales aislantes como lana mineral, espuma de poliuretano o fibra de vidrio. Para minimizar el ruido exterior se puede añadir una capa adicional de paneles de yeso con propiedades acústicas y aplicar sistemas de aislamiento exterior como fachadas ventiladas o sistemas de aislamiento térmico por el exterior (SATE), que además de mejorar la eficiencia térmica, ofrecen beneficios acústicos.

¿Y quién no ha oído el “taconeo” de los vecinos de arriba o las pezuñas del perro corriendo por la casa? Para mitigar esto, podemos instalar un falso techo con paneles acústicos o placas de yeso laminado con propiedades fonoabsorbentes. También se pueden incorporar materiales aislantes entre el techo original y el falso techo, como lana de roca o paneles acústicos. En cuanto a los suelos, el ruido de impacto, como pasos o movimientos de muebles, puede ser reducido instalando un suelo flotante con capas de material aislante entre el subsuelo y el suelo acabado. Colocar alfombras gruesas o moquetas también ayuda a amortiguar los sonidos. Como ve, hay muchas soluciones. Por eso, nuestro principal consejo es consultar con profesionales para evitar soluciones ineficaces que sólo servirán para gastarnos más dinero de forma infructuosa.

Pero sigamos detectando posibles fuentes de ruido. Los conductos de aire y tuberías pueden ser vías de transmisión de ruido. Para reducir este problema podemos utilizar materiales aislantes específicos para conductos de aire y envolver las tuberías con materiales aislantes que reduzcan el ruido del agua en movimiento. Además, algunos elementos decorativos pueden ayudar a absorber el sonido y mejorar la acústica de una habitación, como las cortinas gruesas y pesadas que pueden absorber parte del ruido exterior, y utilizar paneles decorativos.

El aislamiento acústico de una casa no solo mejora el confort, sino que también contribuye a la salud y el bienestar de sus habitantes al reducir el estrés y las interrupciones causadas por el ruido. En este sentido, hay muchos estudios que así lo demuestran. Poner en práctica estas medidas puede transformar un hogar ruidoso en un refugio de paz y tranquilidad. Con un enfoque meticuloso y la elección adecuada de materiales, es posible crear un entorno doméstico mucho más silencioso y agradable. Porque el aislamiento acústico es confort.